Ávila, conocida como Ciudad de los Caballeros, fue declarada Patrimonio Cultural de la Humanidad en 1985. Su muralla determina la ordenación urbanística de su casco histórico. Las plazas, las pequeñas calles, palacios y casonas nobles, dan fe de la relevancia de la ciudad en la época medieval. Bien comunicada y no lejos de Madrid es una buena opción para una excursión de fin de semana. En tren se invierte menos de 2 horas.
Cosas que vimos en Ávila, una ciudad que invita a pasear porque es muy tranquila.
La Muralla de Ávila constituye una de las mejores representaciones de arquitectura defensiva en el mundo. Con 2000 años de existencia ha pervivido a todos los avatares de la historia. De estilo románico, con una altura de 12 metros y 3 metros de grosor, esta muralla de 2500 metros de longitud tiene hasta 87 torreones y 9 puertas de acceso, que han convertido a Ávila en el recinto amurallado medieval mejor conservado de toda Europa. Fue construida a finales del siglo XI aunque ha sufrido varias restauraciones y variaciones a lo largo de los siglos y hasta se planificó derruirla en el siglo XIX para expandir la ciudad, algo que por suerte, no sucedió.
La Puerta del Carmen es una de las puertas más emblemáticas de la muralla y es también conocida como la Puerta de «la Cárcel».
Desde la muralla hay diversas panorámicas de la ciudad y desde allí se van localizando diferentes iglesias o la misma catedral. La iglesia de San Pedro, la iglesia de Santiago, la Basílica de San Vicente,
La Catedral de Ávila está considerada la primera catedral gótica de España, se erige sobre los restos de un primitivo edificio dedicado a El Salvador. Construida alrededor del siglo XII, esta catedral tuvo dos funciones: la de templo religioso y la de fortaleza defensiva al formar parte de la muralla. Su exterior es bastante sobrio pero en el gran espacio interior se ve un espectacular Retablo en el Altar Mayor y destaca también el Coro y el Trascoro.
La Basílica de San Vicente es el gran modelo del románico es Ávila. Data del siglo XII y presenta la singularidad de contar con un triforio gótico sobre las naves laterales. Su planta es de cruz latina con tres naves de seis tramos y un brazo de crucero.
La Iglesia de San Pedro Apóstol se encuentra presidiendo la Plaza del Mercado grande. En su atrio los monarcas juraron respetar los fueros de Castilla, lo que denota la importancia de esta iglesia en el período de mayor relevancia política de la ciudad.
Iniciada en el segundo cuarto del S.XII su construcción concluyó ya en el S.XIII.
El Monasterio de la Encarnación es un convento de clausura de monjas carmelitas. Es conocido porque en él ingresó Santa Teresa de Jesús en 1535, donde fue primero monja y después madre priora, antes de comenzar las fundaciones de conventos de su nueva orden religiosa: la Orden de los carmelitas Descalzos.
La Basílica de Santa Teresa es un edificio construido a principios del siglo XVII, supuestamente sobre la casa natal de Santa Teresa de Jesús. Es de estilo barroco. Forma conjunto con el convento carmelitano y en la cripta se encuentra el museo teresiano.
La Iglesia de San Andrés es de estilo románico ( siglo XII). La cabecera se cubre con una solución de bóvedas escalonadas decrecientes que la hacen muy original.
La plaza del Mercado Chico, o Plaza Mayor, está situada en el centro de la ciudad, intramuros. Es una plaza rectangular con soportales en tres de sus lados. En el lado NE esta el Ayuntamiento, y enfrente la Iglesia de San Juan Bautista.
Entre los numerosos palacios que tiene Ávila pudimos visitar el Palacio de los Verdugo, construido el el primer tercio del siglo XVI. En él destaca el patio central inacabado, con arcadas con decoración floral y escudos de diferentes linajes abulenses, y el artesonado de la escalera.
El palacio de los Dávila fue construido en diferentes momentos entre los siglos XIII y XVI, por lo que se pueden apreciar los diferentes momentos constructivos. El Palacio se encuentra adosado a la muralla.
En la margen izquierda del río Adaja, dominando la ciudad desde lo alto, se erige el humilladero de San Sebastián, popularmente conocido como Los Cuatro Postes. Y es que el conjunto está constituido por cuatro monolíticas columnas dóricas unidas por un arquitrabe, que ostenta el escudo de la ciudad y en el centro una cruz granítica.
Nos "salieron al paso" los Restos del Hospital de Santa Escolástica que en su origen fue un convento cisterciense. Hoy solo queda del inmueble su portada.
Ávila es la capital de provincia más alta de España, a 1131 m sobre el nivel del mar, en virtud de lo cual son relativamente frecuentes las nevadas durante el invierno y un tiempo frío que pudimos comprobar en abril. Una ciudad tranquila para callejear y descubrir todos los rincones y que merece más de dos días de visita por lo que deseamos volver.
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